mayo 24, 2006

Hay un hombre en España - Astrud

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Es el que escribe las canciones de la radio
El que te sirve las copas, el que te vende el diario

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Es el que te coge los bajos del pantalón
Era el cura que te dio la primera comunión

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Es el que escribe todos esos libros
Es el critico literario más leido

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Es el genio visionario que se inventó el Colacao
Es el dueño de Forlasa y es Secretario de Estado

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Es el que que pone anchoas dentro de las aceitunas
Es amante de la infanta y lo es de más de una

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Traduce los artículos de “Le Monde Diplomatique”
Es el que hace los masajes en “Masajes a Mil”

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Se inventa los debates que hacen en Antena 3,
Es cajero del Ikea, y es teniente coronel.

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Es el que redacta y responde las encuestas
Es el gilipollas que reparte las becas

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Es el que programa el Teatro Real
Es la maxima autoridad en derecho penal

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Es el que ha pintado en todas las esquinas
“otro mundo es posible”y “menos policía”

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre que lo hace todo en España

Es el hombre que da todas las propinas
Es un verdadero artista
os voy a dar una pista
os voy a dar una pista

Hay un hombre en España que lo hace todo
hay un hombre… en España

mayo 22, 2006

Un "gran" día

Qué asco de día. Verdaderamente, ahora que son casi las siete y media, me pregunto para qué diablos me he levantado de la cama; casi hubiera sido mejor morir un poco y despertar mañana. Ya me levanté con el pie izquierdo, puesto que tras haber dormido fatal (unas horas rendido al desmayo del sueño en forma de pesadillas y viajes oníricos raros como los dientes de una gallina) tenía un embotamiento en la cabeza y un dolor de cuello insoportable; me levanté más tarde de lo que esperaba porque mi despertador se apagó y no me dí cuenta de la hora que era, y tras ponerme en pie tardé casi una hora en ser persona (maldito embotamiento cerebral, vulgo empanada mental). Para añadir patatas al guiso, tengo la rodilla izquierda destrozada, hoy me duele horrores; desde aquella caída en casa de Paz me duele unos días sí y otros no, y empiezo a pensar que voy a ir al traumatólogo.

Estudiar hasta la hora de la comida fue una tortura, en forma plasmada de lucha contra el sueño y el dolor de cuello, que bajaba por la espalda y me llamaba a tumbarme y no moverme en un año, o dos; finalmente cerré el libro de de Historia de la Filosofía (maldito Selectivo) y me dediqué a darme una larga ducha, que sólo me provocó dolor de cabeza; maravilloso.

La comida tampoco fue una gran maravilla (y encima no me sentó nada bien), una especie de pausa teatral para el espectáculo, en forma de discusión cerrada acerca de mi futuro, y es que mi madre y yo tenemos ideas contrapuestas de lo que debo de hacer con mi vida; hay que joderse, toda una vida diciéndome que decidiera yo mis estudios y ahora no hay tutía, pues mire usted que bien, así que me fui a desconectar escuchando música, la que fuera, pero que resultara ruidosa de algún modo, y así Héroes del Silencio, los Piratas, Avalanch y un par de grupos que no conozco sonaron en el Mp3 ahogando así mis vanos intentos de seguir las letras con una voz que ya no es la que era; hasta que fui a clases, a repasar como quién dice, y perderme luego, como ahora, anclado al pie de la Red, esperado la llamada o el mensaje de una persona que me decepciona más cada día que pasa; quizá porque los rostros son caretas, y todos llevan caretas para tapar otras caretas... Por supuesto, aderezamos todo esto con toda una plétora de rayadas varias; me he encontrado la mitad de las horas perdido pensando... pensando no sé en qué y creo que lo único que me apetece ahora es cerrar los ojos y olvidar.

Sí, realmente, ha sido un gran día.

Sonarán dos grandes verdades, que son canciones: "Si pudiera", de Los Suaves y "Cambio de planes", de Los Secretos.

mayo 21, 2006

Hay un buen sonido para empezar el día, que es el pom-pom del corazón. Podría pasarme horas mirando danzar las tinieblas azules de mi habitación (Déborah me mira detrás de su tumba de cristal) pero preferí respirar bajo las nubes; la cuenta atrás sigue discurriendo y comienzo a pensar que debería estrellar contra la pared el reloj de arena para no seguir viendo los granos que marcan el discurrir de las horas caer incansables, imperturbables, ajenos.

En torno a un café vienés y separados por un metro de distancia, me hubiera puesto la chaqueta, dejado unas cuantas monedas y me hubiera marchado para no tener que mantener la máscara de la sonrisa grabada en mármol ("y recordé su voz bromeando en las tardes, diciéndome que harás si hay cambio de planes"); yo también quiero ver la vida explotar, o sentir unos labios de seda recorriendo mi piel. "Como único equipaje, quiero que traigas tus labios", quiero escribir, ¿pero a quién? Oh, dudle-do, oh, sweet Anna, oh, sweet Daianna, oh, dudle-dudle-doh; éste es el último verso que he escrito: "Oh, estúpida doncella, ¡date la vuelta y vete!", y podría hacerme caso.

Podría seguir tirándole escupitajos al Cielo, pero al cielo le traerá sin cuidado y yo acabaré con un escupitajo en la cara.


Deprimencia (Revólver)

Ese no reírse nunca ese no llorar por nada
Ese no decir lo siento ese no verte llegar
Ese no gritar al viento aunque te rompan la cara
Ese nadar en los charcos y en la tierra naufragar
Ese gesto de extrañeza ese gesto que me da
Lo mismo ocho que ochenta esa incredulidad
Ese no saber callarse ni respetar el silencio
Eso de buscarse excusas cuando sabes que lo que hay es
Deprimencia, de una brújula sin norte
La evidencia, porque le falta el imán
Deprimencia por que no tienes ni idea de a dónde vas

Ese instinto de defensa aunque no te ataque a nadie
Lágrimas de cocodrilo después de comerse a quién
Eso de rezar un credo y dos o tres avemarías
Para perdonar tus culpas y limpiar tu alma otra vez
Ese acojonarse siempre ante lo desconocido
Eso de quemar tu vida ante un lo haré o no lo haré
Ese dar siempre la espalda cuando te viene mal dadas
Eso de buscar excusas cuando sabes que lo que hay es
Deprimencia, de una brújula sin norte
La evidencia, porque le falta el imán
Deprimencia por que no tienes ni idea de a dónde vas
Cuando sabes que lo que hay es
Deprimencia, de una brújula sin norte
La evidencia, porque le falta el imán
Deprimencia por que no tienes ni idea de a dónde vas

Era pura melodía caminando por la acera
Era la banda sonora para un perfecto guión
Era su falda en el aire un remolino violento
Que dejaba a los vivos muertos y a los muertos como son

Deprimencia, de una brújula sin norte
La evidencia, porque le falta el imán
Deprimencia por que no tienes ni idea de a dónde vas
Deprimencia, de una brújula sin norte
La evidencia, porque le falta el imán
Deprimencia por que no tienes ni idea de a dónde vas
Deprimencia, de una brújula sin norte
La evidencia, porque le falta el imán
Deprimencia por que no tienes ni idea de a dónde vas...